Se mecia suave y distante, la cama no era mas que un iman para su cuerpo, ya no queria levantarse, los gatos le mordian las yemas de los dedos, la ventana abierta dejaba entrar la molesta luz de las tres de la tarde y lo único importante era no cerrar los ojos, no queria soñar.
Programitas televisivos chafas que atiborraron su mente aquella tarde le dejaron una pesadez como de borracho, como si la mente se contorsionara y nublara dejando ver derepente cual subliminal mensaje el rostro de artistillas, niños y productos que más que interés le provocaban asco.
El nudo en la garganta parecia mas un nudo de la orca, que extrañamente le provocaba cierta paz, como si por fin todo fuese a terminar; pero no, obviamente lo único importante, indispensable y vital era la lucidez. ¿Cómo guardarla cuando no se sabe dónde empieza y dónde acaba y dónde se deja de existir?
El radual de ideas se le atoro en la mente, empujando las lagrimas al exterior.
'Lady sing the blues' esta noche se vale la melancolía cual necesario antídoto para mal sabor que deja el recordar ciertos pasajes que no hacen más que enmudecer el alma y enfriar todo sentimiento de amor puro hacia los seres que le rodean.
Que venga y nada más!